Cada rincón de este lugar es una especie de episodio en la historia de la Bocamina, por ejemplo en donde hoy se encuentra el bar, se encontraba el almacén de pólvora; al lado se conserva un pequeño museo con objetos utilizados en la ardua labor de excavar, y minerales que pertenecen no sólo a esta mina, sino a todas las que incluía el antiguo distrito de La Valenciana.La Bocamina San Ramón fue el detonante de otras minas porque aquí se descubrió la veta madre, la más rica en el mundo en el siglo XVII.La entrada de la Bocamina es un sendero que recorren muchos visitantes día con día, en la aventura de conocer algún rastro sobre las rocas de la actividad anterior. Se dice que los colores amarillo claro son magnesio, los colores más oscuros son sulfuros de fierro y lo grisáceo es un poquito de plata. “Su arquitectura es monumental” y forma parte de la declaratoria de la UNESCO otorgada a la ciudad de Guanajuato y sus minas adyacentes como “patrimonio cultural de la humanidad” en el año de 1988.